“El esperado aumento en productividad científica del CASEB, no se observó hasta el final del período de financiamiento” afirmó su director.
Considerando el exiguo presupuesto que se dispone en el presente para financiar ciencias a nivel nacional, el diseño de políticas científicas, además de la relevante discusión sobre la implementación de nuevos centros de excelencia en investigación, surge el análisis del desempeño del connotado Center for Advanced Studies in Ecology and Biodiversity (CASEB), el que fue financiado por el programa FONDAP de CONICYT entre los años 2002-2011.
¿Qué evidencia hay de que los programas de financiamiento público existentes son adecuados para realizar investigación de excelencia?, ¿por qué debemos tener políticas científicas de largo plazo?. Son algunas de las preguntas que aborda el análisis realizado por los ecólogos Jaime Rau y Fabián Jaksic relativos al desempeño de dicho centro en el área de la Ecología.
Este estudio, recientemente publicado en el Journal of Scientometric Research, analizó la productividad científica de los 27 investigadores del CASEB en tres períodos: 1) 1996-2000 (previo), 2) 2002-2006 (fase inicial), y 3) 2007-2011 (fase final). Se utilizó el índice h como estimador de la productividad científica, pues es un indicador potente que considera, en un solo valor, investigadores que publican mucho con pocas citaciones e investigadores que publican poco con muchas citaciones.
Los resultados muestran que en período previo al inicio del centro, los investigadores poseían una mediana de índice h de 6. En la fase inicial, este valor disminuyó a 5, mientras que sólo en fase final del período del centro, esta saltó a 12.
“El tan esperado y prometido aumento de la productividad científica del CASEB, no se observó hasta el final del período de financiamiento” afirmó su director, Fabián Jaksic.
Paradoja del enriquecimiento
Se habla que estos resultados son paradojales, pues al inyectar dinero en un centro, se espera ver un aumento en la productividad científica, lo que no se observó en la fase inicial del CASEB. Más específicamente, se habla de una semi-paradoja o paradoja incompleta, pues la fase final del centro revierte los resultados contraintuitivos de la primera fase, con el esperado aumento en la productividad científica de los investigadores.
El financiamiento público del CASEB, de 10 millones de dolares en una década, trajo como consecuencia el aumento de indicadores en productividad y excelencia académica de sus 27 investigadores. Sin embargo, cambios sustantivos en las métricas sólo pudieron apreciarse al final del período de financiamiento y no durante toda la década de su existencia. Así, para evaluar el desempeño de un centro de investigación es necesario considerar tiempos reales que revelen la excelencia, que en el caso del CASEB fue de diez años. También se pone en cuestión la decisión de cortar el financiamiento público justo cuando el Centro llega a su mayor productividad en una década.
Estos resultados demuestran las dificultades que enfrentan los tomadores de decisiones actuales en el diseño de programas de investigación y políticas científicas al momento de planificar a largo plazo, ya que los resultados reales pueden tomar un decenio en percibirse.
Información: Luz V. Oppliger, [email protected]
Referencia:
- Jaime Rau & Fabián Jaksic (2018) The paradox of enrichment in Chile’s ecological science funding. Journal of Scientometric Research 7 (3): 189-193.