El ingeniero y doctor en ecología Sergio Estay se ha especializado en el estudio de plagas forestales y agrícolas, combinando su interés científico por entender cómo se comportan estos fenómenos y su formación como ingeniero aportando a la solución de este problema y al manejo y control de plagas. Actualmente es académico en la Universidad Austral e investigador en CAPES, desde donde colabora en múltiples proyectos.
Dejó el caos y el clima de Santiago para irse a vivir a Valdivia y ya está muy acostumbrado a la lluviosa ciudad sureña. Nacido en Cerro Navia, estudió en el colegio público Nº 395, terminó la educación media en el liceo Amunátegui y entró a estudiar Ingeniería Forestal en la Universidad de Chile. Esos fueron los inicios de Sergio Estay Cabrera, quien continuó estudiando el Magíster en Ecología y luego el Doctorado en Ciencias, mención Ecología en la Universidad Católica de Chile.
Actualmente es académico en el Instituto de Ciencias Ambientales y Evolutivas y director del Magister en Ecología Aplicada en la Universidad Austral de Chile, además de investigador de la línea 4 de CAPES, “Dinámicas de población, cambio global y sustentabilidad socio-ecológica”.
“La ciencia me gustó desde siempre. Me gustaban los documentales de ciencia, las series de ciencia. Y leer, me leía los Icarito, los leía todos. Me gustaban los animales, los bosques, pero nunca me gustó la biología como tal. Yo quería estudiar ingeniería, no era de esos que dibujaban células o cosas así” recuerda Estay. Pero su caminó lo llevó igualmente a la biología y luego a la ecología, y ahora es un destacado especialista en plagas forestales y agrícolas, con decenas de papers publicados, a los que ahora se suman dos libros.
“Yo fui formado como ingeniero. Creo que hay una diferencia grande entre ser formado como científico y ser formado como ingeniero. Al científico lo mueve la curiosidad, el ingeniero lo que busca es resolver problemas”, explica Sergio Estay y se explaya sobre porqué llegó a estudiar las plagas “en ese sentido las plagas son súper interesantes, porque son un tremendo problema, en la parte agrícola, la forestal, y la salud humana”.
Devoradores de bosques y cultivos
El avance de millones de cuncunas Ormiscodes comiéndose el follaje de bosques nativos en extensiones de 4000 a 5000 hectáreas en Aysén, se investiga con imágenes satelitales. “Son el disturbio biótico más grande del hemisferio sur”, señala Estay, “son un fenómeno interesante y bien impactante, es algo que puedes ver realmente, entrar a un bosque que ha tenido un brote de una plaga es impresionante, son hectáreas y hectáreas de daño, se puede ver desde el aire, la dinámica que muestran, cuándo aparecen, cuuando no aparecen, y son económicamente muy problemáticas”.
Según la FAO, las plagas y enfermedades transfronterizas de las plantas afectan a los cultivos alimentarios y plantaciones productivas, lo que causa pérdidas significativas a los agricultores y amenaza la seguridad alimentaria. Su propagación ha aumentado los últimos años, debido a la globalización, el comercio y se cree que también por el cambio climático. Langostas, orugas, mosca de la fruta, polillas, son algunos ejemplos de estas plagas que pueden atacar, morder y destruir cultivos de alimentos o plantaciones forestales.
En Chile en el sector forestal “hay problemas, pero están bien manejados” señala Estay, “no hay nada extremadamente complicado salvo Sirex noctilio (avispa de la madera del pino), algunos hongos y algunas cosas que están en eucaliptus, como Gonipterus o Thaumastocoris que son cosas más recientes. En bosque nativo es difícil hablar de plagas porque en el fondo son parte del sistema, pero probablemente los brotes de Ormiscodes, son de las cosas más impresionantes, como el brote de Aysén”. En el sector agrícola hay más plagas relacionadas a la horticultura, las que requieren un buen manejo. “Hoy en día es cada vez más grande la presión por la inocuidad alimentaria, entonces si se quiere ganar mercado, sobretodo en el extranjero, no se puede llegar y echar insecticida, hay que gestionar las plagas de forma no tan ligada a los químicos y tratar de evitar el ingreso de nuevas plagas”, afirma el ecólogo.
Cambio climático y aumento de plagas
El cambio climático y el aumento de las temperaturas pueden estar provocando efectos en ambos sentidos, es decir, aparecen nuevas plagas y desaparecen otras, o algunas que eran problemáticas ahora no lo son y viceversa. “En el caso de Ormiscodes”, manifiesta Estay, “la evidencia todavía es bien circunstancial, pero básicamente apunta a que efectivamente estos nuevos brotes que aparecen a partir del año 2000 aproximadamente, ahora son muchísimo más frecuentes y más extensos”.
El especialista considera que estamos en un momento de transición y se requiere un proceso de adaptación a este nuevo escenario. Las plagas que se manejaban antes pueden desaparecer, volverse más graves o aparecer otras nuevas. Se necesitará desarrollar herramientas distintas a las actuales para adaptarse a este escenario sanitario, “no me atrevería a decir que hay más o menos plagas, diría que son distintas”.
Nuevas investigaciones y temas
Actualmente, Sergio Estay se encuentra trabajando en su nuevo proyecto Fondecyt, en el que analizarán las herramientas llamadas “modelos de nicho”, que se usan para predecir el establecimiento de nuevos organismos en general y también plagas, “lo que queremos es ver un problema un poco más teórico, ver qué tan buenas son estas herramientas prediciendo”.
En CAPES, el investigador trabaja regularmente con Francisco Bozinovic y con Mauricio Lima, pero también ha estado explorando otros temas, como la salud mental. “Estoy trabajando con un grupo de colegas de la facultad de medicina de la Universidad Austral, en entender la ecología del suicidio. Cuáles son las variables que se asocian a la tasa de suicidios en distintos lugares de Chile, entender los patrones espaciales del suicidio, a qué está ligado, sexo, edad, ocupación, consumo o no de drogas, pobreza, variables ambientales, la latitud, la disponibilidad de horas sol, entre otras variables”, comenta Estay. Ya tienen un paper en preprint y siguen trabajando en otras aristas del tema.
También ha editado dos libros. Uno en 2020 “Forest Pest and Disease Management in Latin America”, para la editorial Springer, que es una colaboración con investigadores e investigadoras de Latinoamérica sobre el manejo de plagas forestales en la región. El otro es “Bases Ecológicas para el Manejo de Plagas”, de 2021, en Editorial UC, “este es más transversal al manejo de plagas, casi diría que más agrícola que forestal”, dice Estay y complementa “quise hacer un upgrade a los libros de texto que había en manejo de plagas, la idea fue coordinar a un grupo de autores, chilenos o que trabajan en Chile, que están haciendo cosas bien de punta y cómo eso une biología o ecología con el manejo de plagas, la idea era lograr este link entre lo básico y lo aplicado que es tan difícil de hacer”.
Texto: Comunicaciones CAPES
Créditos imagen: Sergio Estay