Con propuestas innovadoras culmina el curso “Metodologías de restauración de bosques” en Huinay

En un rincón aislado y remoto, donde la naturaleza despliega toda su majestuosidad, se gesta un proyecto educativo que está revolucionando la forma en que se abordan los problemas medioambientales. Se trata del curso “Metodologías de Restauración de Bosques”, coordinado por los profesores Juan Ovalle (U. de Chile), Jan Bannister (INFOR) y Anahí Ocampo (U. de Chile), donde estudiantes de postgrado de diversas disciplinas se unen en una intensa semana de trabajo bajo un objetivo común: la restauración de ecosistemas degradados.

A través de diversas propuestas con especies nativas se busca apuntar a la restauración de territorios.

El pasado 25 de marzo del 2024 marcó el cierre de la segunda versión del curso de postgrado «Metodologías de Restauración de Bosques», realizado en la Estación Científica de la Fundación San Ignacio del Huinay, ubicada en la comuna de Hualaihué, Región de Los Lagos. Este evento fue organizado en conjunto por los programas de Magíster en Áreas Silvestres y Conservación de la Naturaleza de la Universidad de Chile, Huinay Seasonal School (HSS) y Programa de Observación de Ecosistemas Terrestres y Acuáticos (POETA) de la Fundación San Ignacio del Huinay.

El curso estuvo dirigido por el Dr. Juan Ovalle, académico de la Facultad de Ciencias Forestales y de la Conservación de la Naturaleza de U. de Chile, e Investigador Asociado CAPES y por el Dr. Jan Bannister (INFOR sede Chiloé). También, participaron de forma remota la Dra. Anahí Ocampo, académica de la Universidad de Chile y la Dra. Paula Meli, académica de la Universidad de Concepción y especialista en restauración socioecológica.

Lo que hace único a este curso es su capacidad para crear un entorno de colaboración y acción en un lapso de tiempo reducido. Durante siete días, con jornadas de mañana, tarde y noche, los participantes se sumergieron en un ambiente de trabajo, conscientes de que cada minuto cuenta para lograr un objetivo ambicioso: diseñar una propuesta de restauración a escala de paisaje. 

Las y los estudiantes vivieron una experiencia en terreno para aprender de restauración y reforestación.

El desafío no es sólo técnico, sino también social y ambiental. Los estudiantes, provenientes de diversas especialidades, experimentados y novatos en el ámbito de la restauración, se enfrentan a la tarea de abordar las necesidades presentes y futuras de la comunidad local, al tiempo que enfrentan las presiones cada vez más palpables del cambio climático.

En Huinay, la lección va más allá de los libros y las aulas tradicionales. Aquí, los participantes aprenden en el terreno (con o sin lluvia), enfrentándose directamente a la realidad y trabajando juntos para encontrar soluciones innovadoras y sostenibles.

“La particularidad de este curso es que las condiciones aisladas y remotas donde se emplaza Huinay permite generar un ambiente de trabajo intenso durante 7 días bajo un objetivo común de corto plazo. Estas condiciones generan entre los estudiantes la necesidad de colaborar y aportar desde sus diferentes especialidades para lograr concretar una propuesta de restauración a escala de paisaje, haciéndose cargo de las necesidades actuales y futuras de la comunidad local y de las presiones del cambio climático”, destaca el profesor Juan Ovalle.

Y agrega que: “El particular contexto de uso del territorio de la provincia de Palena permite comprender los procesos de disturbios que ocurrieron a principios del siglo XX, en donde esta localidad se convirtió en un importante centro de explotación comercial del alerce. En 1939, llegaron los primeros colonos desde Río Puelo para explotar el alerce y otros recursos madereros. La deforestación comenzó para abrir terreno destinado a ganadería, agricultura y praderas. Con el tiempo, estas acciones condujeron al ecosistema a un estado de degradación, con incendios forestales, tala desmedida de bosques y uso ganadero intensivo del territorio”.

Propuestas de futuro

La evaluación final del curso consistió en elaborar una propuesta de restauración a escala de paisaje en el contexto del paisaje y la historia de perturbaciones presentes en Huinay. Entre las propuestas que se destacaron se encuentra el proyecto de recuperación de servicios ecosistémicos en bosques de ulmo. Esta propuesta propuso utilizar una metodología combinada de técnicas cualitativas (Recovery Wheel) y cuantitativas (muestreo de parcelas y sub-parcelas) para evaluar el potencial de regeneración natural de acuerdo a un ecosistema de referencia dominado por ulmo, coigue, tineo, y canelo, además de otras especies trepadoras, helechos y herbáceas. 

Otro de los proyectos destacados propuso establecer un bosque experimental para estudiar la respuesta de un bosque en estado de sucesión avanzada frente al cambio climático y simulación de disturbios de pequeña escala. Estas propuestas fueron elogiadas por los académicos, quienes destacaron su innovación, viabilidad y potencial costo-efectivo para su implementación en áreas degradadas dentro del predio de Huinay. 

En tanto, el Dr. Samuel Hormazábal Fritz, director de la Fundación San Ignacio del Huinay, expresó su satisfacción por el éxito del curso y el alto nivel de las propuestas presentadas. Este tipo de iniciativas, dijo, contribuyen significativamente al desarrollo de estrategias de conservación y restauración que beneficien a los ecosistemas forestales y a las comunidades locales.

Este curso no solo transforma paisajes, sino también mentes. Es un ejemplo inspirador de cómo la educación puede ser una fuerza poderosa para el cambio, impulsando a los estudiantes y profesionales a convertirse en agentes de transformación en un mundo que necesita desesperadamente soluciones creativas y comprometidas frente al avance del cambio global. No te quedes fuera de la 3ra versión del curso “Metodologías de Restauración de Bosques 2025”!! (periodo de inscripción a partir de agosto 2024).

Fuente:
Michael Seguel, periodista
Facultad de Ciencias Forestales y de la Conservación de la Naturaleza

Reunión anual de Iniciativa por el Bosque Esclerófilo fortalece cruces interdisciplinares

Los días 8 y 9 de abril de 2024 se realizó la reunión anual de la Iniciativa Intercentros por el Bosque Esclerófilo, que aúna a investigadoras e investigadores del IEB, CR2, CAPES y USACH, con el objetivo de comprender la situación actual del ecosistema Mediterráneo de Chile central, para encontrar formas efectivas de apoyar la resiliencia de los bosques y las comunidades humanas asociadas a este ecosistema.

El equipo se reunió en Olmué, Región de Valparaíso, y dedicó las jornadas a actualizar sus líneas de investigación, que abarcan desde la microbiología de suelo, ecofisiología vegetal, análisis de fauna, restauración, socioecología y análisis a escala de paisaje, además de la comunicación de estos nuevos conocimientos hacia diferentes agentes clave.

Por otra parte, se realizó una visita a un bosque esclerófilo degradado, y se analizaron los logros obtenidos por la Iniciativa durante el último año, los que incluyen una publicación en Nature Plants, una segunda publicación en revisión, formulación de dos proyectos concursables, y diversas colaboraciones en publicaciones y formación de pre-, postgrado y postdoctorado.

El equipo de la Iniciativa incluye a Solange Vargas (UDA), Cristian Delpiano (ULS) y Nélida Pohl del IEB, Juan Ovalle (U. de Chile) y Claudia Rojas-Alvarado (UOH) de CAPES, Alejandro Miranda (UFRO) del CR2, y Francisco Zorondo-Rodríguez del Departamento de Gestión Agraria, USACH. Solange Vargas, académica de la Universidad de Atacama, destaca: “Esta instancia es fundamental para que se produzca sinergia entre investigadoras e investigadores. Necesitamos tiempo de reflexión, para decantar y afinar las ideas que orientarán nuestro trabajo futuro”.

Por su parte Nélida Pohl, Directora de Comunicaciones del IEB añade que “la interdisciplina no ocurre sin intencionar estos espacios de trabajo conjunto, presencial e intensivo. Necesitamos la interdisciplina para entender las interacciones entre las causas de la compleja situación del esclerófilo, sus posibles trayectorias de cambio, y avenidas de adaptación que permitan su bienestar socioecológico a largo plazo”. 

Fuente: Comunicaciones IEB

Huinay Seasonal School: «Metodologías de restauración de bosques»

Cuándo: 19 - 25 de marzo de 2024
Dónde: Estación Científica Fundación San Ignacio del Huinay, Fiordo Comau, Los Lagos
Organiza:  Fundación San Ignacio del Huinay, Facultad de Ciencias Forestales U. de Chile, CAPES, MASCN, Instituto Forestal y Red de Estudios Socio-Ecológicos de Largo Plazo

En el marco de Huinay Seasonal School (Fundación San Ignacio del Huinay), el programa de Magíster en Áreas Silvestres y Conservación de la Naturaleza (MASCN) de la Universidad de Chile invita a estudiantes de postgrado a conocer y profundizar el uso de metodologías de restauración de ecosistemas, entendiendo esta disciplina, como una de las principales herramientas utilizadas en la actualidad para recuperar la calidad de hábitat y la biodiversidad a diferentes niveles (genes, especies y ecosistemas), especialmente enfocado en elementos de la naturaleza de interés para conservación biológica.

El objetivo del curso «Metodologías de restauración de bosques» es generar competencias profesionales para la correcta toma de decisiones en las metodologías que se aplican durante el desarrollo de un proyecto de restauración de bosques, específicamente, en las fases de diagnóstico, planificación y diseño, implementación, monitoreo y evaluación de las acciones restaurativas.

Su programa se compone de clases teórico-prácticas dictadas por académicos/as e investigadores de universidades y centros de investigación nacional e internacional. Durante el curso se promoverá la generación de espacios de debate sobre los desafíos de la restauración en Chile y Latinoamérica, considerando el actual contexto de crisis climática y conflictos socio-ambientales por el uso de la tierra. En específico, las actividades contemplan trabajo de campo para la colecta de muestras, trabajo en vivero para selección de especies nativas utilizadas para reforestación, trabajo en laboratorio para el procesamiento de muestras vegetales y análisis de los datos

Requisitos y costos de inscripción

El curso estará abierto a estudiantes de postgrado de ciencias forestales, ecología y/o conservación, y de forma excepcional habrá cuatro cupos para profesionales del sector público-privado. Dado que el curso tiene cupos limitados (vacantes: 12 estudiantes), los postulantes se cometerán a un proceso de selección en base a orden de llegada de las postulaciones y a los intereses que expresen en la carta de motivación.

El postulante debe enviar los siguientes antecedentes a juan.ovalle@uchile.cl:

  • Carta de motivación (media página)
  • Formulario de postulación (descargar)
  • Certificado de alumno regular (aplica solo a estudiantes de postgrado)

Plazo para postular:
01 de marzo de 2024

Vacantes:
12 estudiantes

Costo del curso:
Estudiantes de programas MASCN o MGPA de U. de Chile: $100.000
Estudiantes de otros programas de postgrado nacional-extranjero: $250.000
Profesionales sector público/privado: $600.000

Programa

Para más detalles del curso, descarga el programa en este enlace:

«Perros de la calle»: estudio identificó las causas y consecuencias de un problema social y ambiental

Investigadores de la Universidad Austral, de la República de Uruguay, y de la Universidad de Wisconsin-Madison, en Estados Unidos, buscaron evaluar ciertos supuestos sobre la relación entre la abundancia de perros en las calles y las características socioeconómicas de la población, con miras a entender cuáles son las principales fuentes de ingreso de estos animales a la vía pública.

Chile es uno de los países con el mayor número de perros con dueño por persona del mundo, y en donde la presencia de perros «libres» es un serio problema sanitario y ambiental. (Créditos foto: Patricia Quiles)

El primer censo de perros y gatos en Chile, realizado en 2022 por la Escuela de Medicina Veterinaria de la Universidad Católica y el Programa “Mascota Protegida” de la Subsecretaría de Desarrollo Regional (Subdere), reportó que 3.4 millones de perros (un 29,4% del total de perros registrados en nuestro país) vive actualmente en la calle.

La realidad de estos animales —y la de otros perros que, pese a tener dueño, deambulan sin supervisión a ciertas horas del día— fue el objeto de estudio de un grupo de investigadores nacionales, quienes buscaron comprender las causas y mecanismos asociados a la presencia y abundancia de Canis lupus familiaris en sectores urbanos y rurales de la región de Los Ríos, y los distintos comportamientos humanos que subyacen a este importante problema socioambiental. 

Para ello, los investigadores registraron la presencia de perros “callejeros” a lo largo de 213 transectos (o puntos de observación) entre julio y octubre de 2018. En conjunto, estos puntos abarcaron 540 mil hectáreas de áreas urbanas (ciudades como Los Lagos, Valdivia y San José de la Mariquina), además de amplias extensiones de bosque nativo, plantaciones forestales, y tierras agrícolas. 

Los datos obtenidos durante estas incursiones, además de entrevistas realizadas a los vecinos del lugar, permitieron al equipo de investigación evaluar algunos supuestos acerca de la relación existente entre la abundancia de perros en las calles y las características socioeconómicas de la población, o más específicamente, la incidencia que estos factores tienen sobre el número de perros viviendo en la calle en una zona determinada.

Así, “en la región de interés para este estudio, observamos que un porcentaje importante de los dueños de perros (cerca de 30% en áreas urbanas, y 70% en áreas rurales) permiten que estos deambulen libremente en la calle, independientemente del contexto socioeconómico. Es así que gran parte de los perros presentes en la calle tiene un dueño definido, y se vuelven más abundantes en los sectores de bajo ingreso económico, donde la densidad de hogares es también mayor”, nos cuenta Ariel Farías, investigador del CAPES y académico de la Universidad de la República, en Uruguay

El investigador, uno de los coautores del estudio, advierte sin embargo que este (la densidad poblacional) es sólo uno de los factores que explicaría la presencia de perros callejeros y su abundancia mayor en sectores menos favorecidos: “el abandono de animales en la vía pública es otro fenómeno que se manifiesta más fuertemente en zonas rurales y de menor ingreso. En zonas urbanas, la presencia y persistencia en la calle de los perros sin dueño se ve favorecida también por los cuidados provistos por la gente del lugar, en forma de alimento y refugio. Estos factores, en conjunto, explican en gran medida las diferencias observadas en la abundancia de perros presentes en la calle” explica

La abundancia de perros «callejeros» se correlaciona con el número de perros con dueño con acceso al exterior y a su vecindario, descubrió el estudio. (Créditos: Carla Ulloa Vera)

Con dueños, pero sin supervisión

Pese a que el estudio no ahondó en los motivos detrás de estos comportamientos, Farías comentó que trabajos realizados en otras localidades, como el de Astorga y colaboradores, muestran que si bien la mayoría de los dueños reprueban la existencia de perros deambulando libremente en la calle, un gran porcentaje de ellos lo permite de todas formas, arguyendo razones como el alto costo económico requerido para su correcto confinamiento, la ocurrencia de escapes involuntarios, entre otros.

Sin embargo, prosigue el investigador, esto puede variar mucho de un contexto a otro: “algunos relevamientos que realizamos con estudiantes en Uruguay, por ejemplo, determinaron que en una localidad costera los dueños de perros mostraban una actitud positiva asociada a la libertad de los perros de moverse libremente” menciona, “incluso, algunos expresaron que la posibilidad de que los perros pudieran pasear por los alrededores fue uno de los factores que influyó positivamente en la selección de dicha localidad para vivir”.

De hecho, el mismo censo de la Escuela de Medicina UC detectó en 2022 que un 51% de las mascotas (perros y gatos, principalmente) duerme afuera de las casas, y que un 19,8% de ellos salen solos a la calle, confirmando la recurrencia de este tipo de comportamientos en nuestro país.

En cuanto al número de perros abandonados (otro de los comportamientos analizados) en el 75% de los transectos se observó a ejemplares sin un dueño aparente, mientras que residentes reportaron el abandono de animales por parte de vecinos en un tercio de los puntos de observación. La falta de atención veterinaria también fue un fenómeno común: en 57% de los transectos se reportó al menos a un perro que no asistió al veterinario en los últimos 12 meses, y la presencia de animales no vacunados contra la rabia, desparasitados o castrados fue observada en el 70, 45 y 87 por cientos de los terrenos.

Por último, 45% de las personas encuestadas comentaron haber dado de comer a perros callejeros en áreas aledañas a sus casas, lo que supone que estos perros fueron alimentados, al menos ocasionalmente, en 71% de los transectos donde se realizaron entrevistas. Durante las observaciones, de hecho, los investigadores detectaron evidencia de comida y agua en 32% de los transectos de zonas urbanas, y sólo en un 1.9% de las rurales.

Estrategia multidimensional

En muchos casos, durante sus paseos, los mismos investigadores pudieron apreciar, y registrar, algunos de los impactos negativos asociados a los perros abandonados y «callejeros».

Otro de los aspectos estudiados en el trabajo, fueron los potenciales impactos sociales y ambientales de este fenómeno. Casi dos tercios de las personas encuestadas consideraron a los perros que viven en la calle un problema en su área, siendo los problemas más reportados la presencia de heces en veredas y antejardines, daños en bolsas de basura, ataques a otros perros, sensación de inseguridad y amenaza, acoso a otras especies silvestres (especialmente aves) y,en zonas rurales, el ataque al ganado y a aves de corral. 

Alrededor del mundo, los perros que viven en la calle son una importante preocupación sanitaria y ambiental. 59 mil personas al año mueren en el planeta a causa de mordeduras de perros con rabia, y según estimaciones, más del 1% de la población es mordida por un perro anualmente. Canis lupus familiaris también puede ser un transmisor de hidatidosis (o equinococosis), entre el ganado, una enfermedad parasitaria causante de enormes pérdidas económicas a nivel global en la industria ganadera. 

Desde el punto de vista ambiental, los perros libres pueden amenazar seriamente la biodiversidad, siendo el tercer depredador invasor que más daños causa a otros vertebrados, sólo superado por las ratas y los gatos. Asimismo, estos animales afectan negativamente una serie de necesidades humanas fundamentales, tales como la seguridad, la subsistencia, y la búsqueda de afecto. 

Para los investigadores, cualquier estrategia que apunte a reducir el número de perros que deambulan libremente debería centrarse principalmente en aquellos perros con dueño, y especialmente en los dueños de estos perros. “Específicamente”, arguyen, “el componente central de cualquier política responsable de tenencia de perros debería ser mantener a los perros dentro de casa”.

“Esto es clave en países como Chile” continúan, “donde el número de perros con dueño por persona es extremadamente alto en comparación con la mayoría de los países del mundo, y en donde la contención de las mascotas —pese a la promulgación, en 2017, de una inédita ley de tenencia responsable de mascotas— no es estrictamente regulada, como se observó en nuestro estudio”.

“Desde mi punto de vista personal” añade Ariel Farías, “es importante moverse hacia una legislación que regule tanto la cría de animales como las condiciones mínimas para su tenencia. De poco sirven las campañas masivas de esterilización de animales vagabundos en las calles, si al mismo tiempo no se evita el abandono de animales o si no se mejora las condiciones de confinamiento y control de sus movimientos”. 

Para el investigador, promover las condiciones para el mantenimiento de los animales dentro de los hogares, o el paseo con correa en sitios habilitados, disminuir su tenencia en espacios no aptos (por ejemplo de escasa superficie), y la reproducción indiscriminada, posiblemente reduciría el número de individuos en las calles y la frecuencia de los problemas asociados a estos. “Es importante reconocer que detrás de todos estos aspectos existen tanto factores culturales como limitantes económicas, y que los perros cumplen diversos roles en el hogar (compañía, protección de bienes y personas, etc.). En mi opinión la provisión de espacios adecuados para el movimientos y socialización de los animales, así como brindar soluciones económicas en contextos de menores recursos para la adecuación de los espacios dentro de los hogares pueden resultar tan importantes como la legislación y fiscalización, y de hecho mejoraría la efectividad en el mediano y largo plazo de estas últimas” concluye.
Los resultados completos de este estudio fueron publicados recientemente en la revista internacional Science of the Total Environment.

Fuente: Comunicaciones CAPES

U. de Magallanes se adjudica primer concurso de Líneas de Base Pública de la región

En la ceremonia de entrega de los resultados del concurso también participó la Dra. Rosanna Ginocchio, subdirectora de CAPES. El Centro apoyará a la institución responsable en el diseño y ejecución de esta importante tarea.

Con el objetivo de impulsar el desarrollo productivo sostenible en Chile, el Ministerio del Medio Ambiente entregó el resultado del concurso Líneas de Base Pública (LBP) de los Ecosistemas de la Región de Magallanes y la Antártica Chilena, que terminó adjudicándose a la Universidad de Magallanes (UMAG).

En una ceremonia realizada en la Gobernación Regional de la Magallanes, el Subsecretario del Medio Ambiente, Maximiliano Proaño, dio a conocer a los ganadores, quienes ahora tendrán la misión de elaborar las líneas de base públicas para las provincias de Magallanes y el norte de Tierra del Fuego, además de proponer un sistema de monitoreo de largo plazo que permita facilitar procesos de evaluación ambiental.

“Este concurso es una inversión histórica para el Ministerio del Medio Ambiente en la región de Magallanes, ya que considera $1.000 millones de pesos para levantar información pública y abierta que podría ser utilizada para diferentes fines por la sociedad civil, la comunidad científica y el propio gobierno”, explicó Proaño.

La subdirectora de CAPES, Dra. Rosanna Ginocchio, durante la ceremonia de resultados del concurso.

En la actividad también participaron el Delegado Presidencial, José Ruiz Pivcevic; el Gobernador Regional, Jorge Flies; la Subsecretaria de Ciencias, Carolina Gainza, la rectora (s) de la UMAG, Anahí Cárcamo y la subdirectora de CAPES, Rosanna Ginocchio

El grupo de investigadores y profesionales de la Universidad de Magallanes, asesorados por el Centro de Ecología Aplicada y Sustentabilidad, CAPES, será liderado por la bióloga marina del Instituto de la Patagonia Erika Mutschke, y tendrá la responsabilidad de elaborar las líneas de base ambientales marinas y terrestres para las Provincias de Magallanes y el norte de Tierra del Fuego.

Al respecto, el gobernador Flies explicó que “Chile está siendo protagonista en las posibilidades de solución del cambio climático. Tenemos materiales como el litio y el cobre que son fundamentales para la transición energética y Magallanes, con su viento característico, es posiblemente uno de los lugares que pueda entregar mayor cooperación con un combustible como lo es el Hidrógeno Verde. Y es fundamental tener conocimiento y hacer investigación de nuestra naturaleza para poder acoger su desarrollo productivo. Nos hemos comprometido como Gobierno Regional que el desafío que tenemos es abarcar mayores temas, mayor territorio y posteriormente lo que va a ser el monitoreo de estas mismas líneas bases a futuro y eso significa complementar los recursos que hoy día, en vanguardia ha dejado este proyecto al ser Magallanes la primera región en contar con una Línea Base Pública”.

La Subsecretaria de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, Carolina Gainza, comentó respecto al proyecto Líneas Bases Públicas que “esto permitirá tener políticas públicas mucho más robustas en esta materia y una participación de la ciudadanía con información fidedigna. Por eso es tan importante la investigación y que esa investigación se elabore en el territorio, en Magallanes”.

En tanto, la Jefa de División de Desarrollo Productivo Sostenible del Ministerio de Economía, Aintzane Lorca, destacó que “el gobierno está trabajando decididamente para disminuir brechas de productividad, avanzar hacia la carbono neutralidad, y generar empleos de calidad, promoviendo un crecimiento económico que esté impulsado por un desarrollo sostenible en términos sociales, medioambientales y económicos”.

Por su parte, la Seremi del Medio Ambiente, Daniela Droguett Caro, señaló “celebramos este financiamiento que nace en y para Magallanes y replicándose en el resto del país. El Proyecto de Líneas Bases Públicas nos permitirá valorar, conocer y reconocer la riqueza y abundancia de nuestra biodiversidad tanto marina como terrestre. Inicialmente este proyecto estará relacionado con el desarrollo de la industria del hidrógeno verde, pero que sentará las bases para otros espacios productivos en nuestra región, aportando al cuidado y la protección de nuestro medio ambiente, reconociendo la importancia de nuestros ecosistemas, como la estepa magallánica”.

La importancia de las Líneas de Base Pública

Actualmente las líneas de base son levantadas por los titulares de los proyectos que ingresan a evaluación ambiental, sin contrapartida de información pública lo cual ocasiona dificultades en el desarrollo de proyectos de inversión y conflictos socioambientales con las comunidades locales.

Contar con líneas de base públicas levantadas desde el Estado disponibles para todas las partes de la sociedad, permitirá complementar y contrastar la información provista por los titulares y facilitar los procesos de evaluación ambiental al generar mayor certidumbre.

Adicionalmente, las líneas de base públicas serán un insumo relevante para el uso en instrumentos de política pública como el ordenamiento territorial. A su vez facilitará la medición de servicios ecosistémicos, valoración del capital natural y generación de indicadores de desarrollo productivo sostenible.

Fuente: Gobierno Regional de Magallanes y de la Antártica Chilena

Identifican árboles prioritarios para restauración socioecológica de cuenca del río Toltén

El trabajo, publicado en la revista Restoration Ecology, buscó incorporar una dimensión socioecológica a la planificación de objetivos de restauración en tierras con fines agrícolas o silvícolas, considerando para ello la información provista por las familias campesinas que viven alrededor de los ríos y esteros de la cuenca del río Toltén.

(Créditos: Christian P.)

En un estudio que incluyó la participación de los mismos habitantes y productores de la zona, investigadores de la Facultad de Agronomía y Sistemas Naturales de la Universidad Católica identificaron más de 60 especies de árboles nativos clave para la restauración de los hábitats ribereños que componen la cuenca del río Toltén, en la región de la Araucanía, un área altamente degradada por la actividad agrícola.

De ellas, cinco especies prioritarias destacaron por la alta frecuencia de menciones, y el variado conocimiento qué los participantes del estudio tenían sobre sus usos y manejos. Estas especies fueron: el roble pellín (Nothofagus obliqua); el coigüe (Nothofagus dombeyi); el arrayán (Luma apiculata); el canelo (Drimys winteri), y el laurel chileno (Laurelia sempervirens).

El trabajo, publicado recientemente en la revista Restoration Ecology, buscó incorporar una dimensión socioecológica a la planificación de objetivos de restauración en tierras destinadas a la ganadería o al cultivo de cereales y frutales, considerando para ello la información provista por las mismas familias campesinas que viven y se asientan en las riberas de los ríos y esteros que componen la cuenca. Entre sus autores, se encuentran los investigadores del CAPES Isabel Rojas y Tomás Ibarra, además de Tania Lucero, de los centros CIIR y CEDEL UC.

“El conocimiento de los aspectos socioculturales de los paisajes permite avanzar hacia iniciativas de restauración ecológica más efectivas”, explicó Isabel Rojas en conversación con CAPES, “lo más importante es diseñar planes de restauración que incorporen los usos que las personas hacen de la biodiversidad para sustentar sus vidas, de manera que se reduzcan conflictos de restauración con la economía de las familias” agregó.

Entre los usos más frecuentemente mencionados por los 45 propietarios entrevistados (27 hombres y 18 mujeres), destacaron los de extracción de leña y madera para la construcción, donde el roble y el coigüe predominaron.

A partir de estos resultados, los investigadores encontraron una gran variabilidad en las condiciones socioculturales y ecológicas de los hábitats ribereños a lo largo del territorio. Por ejemplo, algunas riberas mostraron alto valor social, pero bajo valor ecológico.[IR1] .Así y todo, la mayoría de los hábitats estudiados mostraron una baja presencia de especies prioritarias y malas condiciones ecológicas.

Para los autores, las diferencias observadas en la valoración de estos hábitats puede ser un insumo importante a la hora de predecir el éxito o fracaso de planes de restauración en zonas donde la relevancia sociocultural de las especies puede entrar en conflicto con su relevancia ecológica. “En nuestro estudio, por ejemplo, encontramos que las especies prioritarias tienden a ser especies abundantes y pioneras, en muchos casos asociadas a procesos de degradación del bosque, por lo que, desde el punto de vista de la conservación de biodiversidad, podrían no ser elegidas como objetivo de restauración en el largo plazo” comenta Rojas. “Al mismo tiempo”, continúa “encontramos que las especies arbóreas son frecuentemente usadas para leña y construcción, por lo que un programa de restauración con estas especies podría implicar que el bosque restaurado va a ser usado para esos fines en el largo plazo, a fin de proveer esos usos a las personas.”

Pese a ello, también pueden existir sinergias entre criterios aparentemente disímiles, advierte la investigadora: “por ejemplo, los indicadores nos permitieron identificar donde hay riberas en que varias especies de importancia sociocultural coexisten, y tienen altos valores ecológicos. Esos sitios pueden ser referencia para diseñar proyectos de restauración en otros sitios que están más degradados. Lo más relevante de considerar estos indicadores es ver las sinergias y los conflictos” concluye.

En términos generales, el trabajo proporcionó información original sobre el valor sociocultural y ecológico de los hábitats ribereños al integrar simultáneamente conocimientos sobre los árboles que son importantes para las personas y, al mismo tiempo, abordar la condición ecológica de los bosques ribereños en un hotspot de biodiversidad global. Un enfoque valioso para el establecimiento de planes de restauración y conservación de bosques, y para la toma de decisiones.

“Los planes de restauración deben innovar y desarrollar aproximaciones inclusivas que permitan motivar a los propietarios a participar en la restauración, por ejemplo, considerando las especies más importantes para las personas y sus usos” finaliza Rojas.

Texto: Comunicaciones CAPES

CAPES y Facultad de Ciencias Forestales de la U. de Chile capacitan en terreno a profesionales CONAF

El pasado 7 y 8 de noviembre, 14 funcionarios CONAF provenientes de diversas regiones del país participaron de un taller que buscó validar la efectividad y utilidad de los planes de restauración como instrumentos de gestión y conservación de los ecosistemas naturales y los servicios que éstos proveen, con miras a la aplicación del Plan Nacional de Restauración a Escala de Paisajes (PNRP) elaborado por el Estado de Chile en 2020.  

El taller, coordinado por el investigador CAPES y académico de la Facultad de Ciencias Forestales y de la Conservación de la Naturaleza de la U. de Chile, Dr. Juan Ovalle, fue una continuación práctica del curso celebrado el pasado año a estos mismos profesionales, y, al igual que éste, se enmarca dentro del Plan Anual de Capacitación encargado por la Gerencia de Conservación de Ecosistemas Boscosos y Xerofíticos de CONAF en 2022.

Durante esa primera instancia, los participantes elaboraron una serie de pautas técnicas para establecer criterios de selección de material de propagación (semillas y plantas nativas) en viveros forestales, y criterios para el monitoreo del avance de los procesos de restauración a escala de paisaje, ambas con implicancias directas en componentes del PNRP. En este segundo taller, denominado “Desarrollo de Pautas Técnicas para la Evaluación de Proyectos de Restauración”, Ovalle y su equipo buscaron validar la efectividad de estos instrumentos aplicándolos a experiencias reales de restauración en terreno.

Validando pautas en Quebrada de la Plata

En la primera jornada del taller, los estudiantes visitaron las dependencias de la Estación Experimental Germán Greve Silva, en la comuna de Maipú, para informarse sobre los principales aspectos prácticos a considerar a la hora de realizar un monitoreo de restauración de paisaje, y recibir instrucciones generales sobre la jornada.

Las exposiciones, a cargo del profesor Ovalle y la coordinadora de la Estación Experimental, Solange Vargas, también sirvieron para conocer el trabajo que realiza la Facultad de Ciencias Agronómicas de la Universidad de Chile en este recinto, que además de contar con espacios para la producción de rumiantes menores y el manejo de pastizales en áreas de secano, alberga también uno de los 11 santuarios de la naturaleza que posee la región Metropolitana, el Santuario Nacional Quebrada de la Plata.  

Justamente, una vez concluidas las presentaciones, los participantes del taller debieron recorrer buena parte de las 1.100 hectáreas del Santuario para observar, en terreno, tres de los proyectos de restauración que actualmente se ejecutan en esta zona, con el fin de levantar datos que les permitieran evaluar adecuadamente el estado de avance de estos experimentos, utilizando para ello las pautas técnicas diseñadas en el curso de 2022. 

De regreso a la Estación, los estudiantes fueron parte de un trabajo grupal donde discutieron y validaron los criterios y/o atributos seleccionados para el monitoreo de estos proyectos, el cual estuvo a cargo de la profesora de la Facultad de Ciencias Forestales de la U. de Chile, Dra. Anahí Ocampo.

Sobre esta primera jornada, el profesor Ovalle dijo que “la importancia de que profesionales como los de CONAF aprendan y se involucren en estos procesos de capacitación es muy grande, dado que ellos van a ser actores fundamentales de la implementación del Plan Nacional de Restauración a Escala de Paisaje. Ellos van a tener la tarea de monitorear el avance de los procesos de restauración que se van a ir dando durante la próxima década. De ahí lo importante de que conozcan la diversidad de metodologías que hay para monitorear procesos de recuperación de ecosistemas degradados.” 

Por su parte, la Dra. Ocampo valoró positivamente esta segunda versión práctica del curso: “estoy muy contenta de haber participado en esta nueva edición, donde por fin pude conocer personalmente a cada uno de los estudiantes, y aprender muchísimo de ellos, que son profesionales con mucha experiencia. Fue muy grato estar caminando entre las parcelas y poder discutir y poder escuchar las distintas visiones que tienen, lo que me permitirá ajustar mis clases y metodologías a sus realidades y a lo que necesitaban”. 

Estudiando semillas en San Pedro

El miércoles 8 de noviembre las y los profesionales de CONAF participaron de la segunda jornada donde se desarrolló un taller teórico-práctico donde pusieron sus aprendizajes a prueba en el Vivero San Pedro, en la región Metropolitana.

Allí, se tomaron en consideración aspectos en la cadena de provisión de semillas y plantas para planes de restauración. De esta manera, se realizó la aplicación de una pauta técnica que tomó en cuanto el levantamiento de información del vivero a partir de datos entregados por su encargado; la evaluación de atributos e indicadores de calidad de infraestructura como de la calidad de semillas y plantas de vivero.

Claudia Alcaraz, profesional de la Red de Viveros de CONAF, desde donde se encargan de las 30 unidades a nivel nacional destacó la importancia de este tipo de capacitaciones “principalmente para ver la ejecución respecto del trabajo que nosotros realizamos en nuestras unidades y evaluar si, además de los viveros a nivel nacional que producen plantas para distintos fines, como los productos se orientan hacia la reforestación”.

Juan Vera, encargado del Vivero San Pedro y quien lleva más de 20 años trabajando en esta área destaca la participación y el uso de espacios para el desarrollo de nuevos conocimientos. “Me parece excelente que se puedan hacer este tipo de capacitaciones en nuestra Unidad y todas estas instancias sirven de aprendizaje tanto para nosotros como trabajadores para poder traspasar estos conocimientos”, señala Vera.

“Con esta capacitación estamos desarrollando un instrumento de evaluación para seleccionar los viveros idóneos para proveer semillas y plantas nativas para los proyectos de restauración», comenta el profesor Ovalle. Y agrega que: “el grupo de profesionales de diferentes comunas y oficinas de CONAF, está encargado de evaluar una pauta técnica que ellos mismos diseñaron y que validamos en un vivero”.

Revisa más imágenes de ambas jornadas

Texto: Comunicaciones CAPES y Facultad de Ciencias Forestales y de la Conservación de la Naturaleza, U. de Chile

CAPES participa en celebración por los 30 años de Ingeniería Forestal en la Universidad Católica

El rector Ignacio Sánchez durante su intervención.

El pasado 10 de octubre, en el Auditorio Principal del Centro de Innovación UC, ubicado en Campus San Joaquín, la carrera de Ingeniería Forestal de la Universidad Católica celebró sus 30 años de existencia con una ceremonia que contó con la presencia de autoridades, estudiantes y destacados académicos nacionales e internacionales, los cuales conmemoraron el ingreso de la primera generación de estudiantes a este programa de estudios en 1993. 

Entre los invitados al evento, estuvo el rector de la Universidad Católica, Prof. Ignacio Sánchez, quien dio comienzo al acto enfatizando el rol que ha tenido esta carrera en la formación de los más de 400 ingenieros e ingenieras forestales que han pasado por sus aulas, y la capacidad de su malla de estudios para adaptarse a las necesidades de la industria y la demanda por un manejo más sostenible de nuestros bosques y recursos naturales en los últimos años.

La actividad también incluyó la participación de actores fundamentales en la creación de la carrera, como la recientemente asumida decana de la Facultad de Agronomía y Sistemas Naturales, Prof. María Angélica Fellenberg, el decano saliente Rodrigo Figueroa, y los académicos Eduardo Venezian, André Laroze, Sonia Reyes, Rodrigo Arriagada, M. Paulina Fernández, Horacio Gilabert y Cristián Bonacic. También estuvieron presentes los investigadores CAPES Rosanna Ginocchio, Pablo Becerra y Eduardo Arellano, miembros destacados del actual plantel académico de la carrera.

El Dr. Juan Oliet, de la Universidad Politécnica de España, fue el invitado de honor de la ceremonia, y a él correspondió liderar una enriquecedora conversación sobre el futuro de la enseñanza de las Ciencias Forestales.

Asimismo, durante la realización del evento, el hall central del Centro de Innovación fue sede de una pequeña feria de innovación y emprendimiento donde diversas instituciones pudieron exhibir algunos de sus proyectos asociados al campo de la ingeniería forestal y la industria maderera. Entre ellas, el programa de certificación de jardines particulares “Jardines x la Biodiversidad”, de CAPES, presentó un stand con los avances de esta iniciativa y algunos de los productos generados en torno a este importante programa de educación y evaluación, que busca llevar la ecología y la conservación de los ecosistemas a los jardines y terrazas privadas de la región Metropolitana. 

Cabe destacar que la organización de esta celebración y de sus actividades asociadas estuvo a cargo de  la académica Isabel Rojas, investigadora de la línea 1 de CAPES sobre impactos ambientales de los metales y rehabilitación de suelos. 

Revive el evento en el siguiente video:

Texto: Comunicaciones CAPES

Estudio de académico propone técnicas para reforestar bosque esclerófilo de Chile central

La plantación de especies nativas como el huingán y el litre podrían mejorar los resultados en la restauración del bosque esclerófilo del centro del país. Lo anterior, como parte de técnicas que logran mitigar los efectos que la crisis hídrica produce en estas zonas.

En un esfuerzo por abordar las dificultades en la restauración de ecosistemas forestales nativos en el contexto de la megasequía, académicos y académicas de la Universidad de Chile, Pontificia Universidad Católica de Chile y Universidad Politécnica de Madrid, España, propusieron técnicas más efectivas y económicas para restaurar bosques esclerófilos de la zona central de Chile. Lo anterior, mediante la investigación «Técnicas silviculturales costo-efectivas para reducción de estrés hídrico de plantas en procesos de restauración de bosque esclerófilo», realizada entre 2018 y 2022.

De acuerdo con el Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (Cr2), la persistencia temporal y la extensión espacial de la actual sequía en Chile, es extraordinaria en el registro histórico, siendo este evento denominado como “megasequía”. Desde 2010 el territorio comprendido entre las regiones de Coquimbo y de La Araucanía ha experimentado un déficit de precipitaciones cercano al 30%.

Este déficit ha provocado la degradación de los suelos, riegos ineficientes y otras dificultades para el cuidado y mantención de los bosques esclerófilos. Buscando ser aporte ante este escenario, durante tres años se llevó a cabo el proyecto «Técnicas silviculturales costo-efectivas para reducción de estrés hídrico de plantas en procesos de restauración de bosque esclerófilo». La iniciativa fue posible gracias al financiamiento del Fondo de Investigación del Bosque Nativo de CONAF, y el apoyo del Centro de Ecología Aplicada y Sustentabilidad (CAPES).

Tras esta investigación, se generó un manual técnico para explicar los métodos utilizados para probar diferentes técnicas de plantación y el monitoreo de las respuestas en el terreno. Así, se identificaron diversas estrategias claves para mejorar la efectividad de los planes de restauración del bosque esclerófilo.

La iniciativa contó con la participación de los investigadores CAPES Juan Ovalle, de la Facultad de Ciencias Forestales y de la Conservación de la Naturaleza UCH, Eduardo Arellano y Pablo Becerra, además de Marcelo Talamilla, Cesar Figueroa y Nadia Rojas-Arévalo de la Universidad Católica. Juan Oliet, de la Universidad Politécnica de Madrid, fue el representante internacional del equipo.

En el marco de la iniciativa, prontamente se realizará el lanzamiento del libro “Restauración de Ecosistemas Forestales”. Ejemplar que en 28 capítulos presentará gran parte de los resultados que se obtuvieron en el proyecto, junto con una amplia diversidad de temas en torno a la restauración de ecosistemas redactados por un selecto grupo de especialistas en el tema, esperando que sea un texto de cabecera para las futuras generaciones de restauradores en Chile.

Puntos clave de la investigación

Juan Ovalle, investigador CAPES y U. de Chile

En el estudio se destacaron diversos aspectos fundamentales para mejorar la efectividad de la restauración del bosque esclerófilo. Entre ellos, se encuentra la selección de fuentes semilleras de procedencia local o cercana al sitio de restauración; la utilización de acondicionadores de suelo, como los hidrogeles y el compost; y el uso de riego de establecimiento durante la primera temporada seca. Cada uno de estos puntos se destacan como pilares fundamentales para una reforestación costo-efectiva, “aunque no garantiza el éxito”, señaló el profesor Ovalle.

Asimismo, el académico destacó que «la necesidad de disminuir la incertidumbre en los proyectos de reforestación con especies nativas se ha transformado en un aspecto cada vez más urgente de abordar desde la investigación, debido a que producto de las recurrentes anomalías climáticas (olas de calor, sequías) ya no es posible garantizar el éxito de una plantación a corto y mediano plazo en la zona Central de Chile».

Junto a lo anterior y en busca de mejores resultados, la investigación sugiere la inclusión de especies poco tradicionales en las prácticas de reforestación. El huingán (Schinus polygamus) y el litre (Lithraea caustica) emergen como opciones útiles y necesarias. «Diversificar el uso de especies nativas puede mejorar significativamente los resultados de los esfuerzos de restauración, dado que diversificas también los rasgos funcionales en la comunidad vegetal, y con esto, las estrategias de uso de recursos en ambientes limitantes», señaló el académico de la U. de Chile.

En la batalla contra el estrés hídrico, el riego también se revela como una herramienta fundamental. Según el profesor Ovalle, «el riego en las etapas iniciales es esencial, y nuestros datos respaldan un uso mínimo de 4 litros por planta al mes durante la temporada seca estival del primer año post-trasplante». No obstante, el académico UCH indicó que es necesario seguir investigando sobre la dosis óptima de riego en programas de reforestación ya que, estas deben ajustarse a la demanda de la especie y a la dinámica del agua en el perfil de suelo del sitio de plantación.

De este modo, la investigación no solo proporciona claves valiosas para la restauración del bosque esclerófilo, sino que también refuerza la importancia de la adaptación y la innovación en la conservación de los ecosistemas naturales en medio de un entorno en constante cambio.

¿En qué consisten las técnicas de hidrogel, compost y “pozo seco»?

Como se menciona anteriormente, dentro de las estrategias propuestas por la investigación se contemplan tres técnicas para la reforestación. Entre ellas, la de pozo seco, hidrogel y compost, las que permiten abordar distintos desafíos que presenta el proceso de recuperación de bosques nativos, como la complejidad de riego y la degradación de los suelos.

En cuanto a la técnica de pozo seco, esta se basa en que dentro de la casilla de plantación se dispone de una columna cilíndrica de 11 cm de diámetro con piedras de distintos tamaños, a lo largo del perfil de la casilla, para generar un efecto dren, que permite una rápida infiltración del agua.

Por su parte, la estrategia en base a hidrogel consiste en polímeros hidrofílicos e insolubles en agua, capaces de absorber y retener agua y solutos. Su aplicación en la casilla de plantación tiene un efecto variable sobre las plantas, según el tipo de polímeros, la dosis y la forma de aplicación. En condiciones de sequía prolongada y suelos arcillosos, los hidrogeles pueden competir con la planta por el agua.

Finalmente, las enmiendas orgánicas o compost, son fuentes de materia orgánica estabilizada que pueden contribuir a mejorar los contenidos de carbono y nutrientes del suelo y por ende la productividad de las plantas. Algunos ejemplos son compost, humus, lodos estabilizados, etc.

Para su aplicación es importante considerar su fuente, nivel de estabilización, las dosis y las formas de aplicación. Las enmiendas de origen agroindustrial pueden aumentar la salinidad en la casilla, situación que se agrava en condiciones de sequía.

Texto:
Michael Seguel, Facultad de Ciencias Forestales y de la Conservación de la Naturaleza, U. de Chile