Columna: Restaurando el bosque esclerófilo del Parque Interpretativo San Carlos de Apoquindo

La siguiente columna fue escrita por los miembros CAPES, Dra. Francisca Boher y Dr. Patricio Pliscoff para una nueva edición del boletín «Dimensión Sustentable», de la Dirección de Sustentabilidad de la Pontificia Universidad Católica de Chile.

El bosque esclerófilo, parte del ecosistema mediterráneo de Chile central, es un tipo de vegetación caracterizada por su alto endemismo y por el constante verdor de sus árboles y arbustos. Sin embargo, entre la primavera de 2019 y el verano de 2020, parte de este bosque experimentó un evento masivo de desecación que lo transformó de un momento a otro en un “bosque café”, un fenómeno conocido como pardeamiento. Peumos, quillayes, litres, lingues y bellotos no pudieron resistir once años consecutivos de sequía.

Este suceso provocó un profundo daño a la estructura y funcionamiento del bosque, así como a los beneficios que recibimos de él, como el control de la erosión del suelo, la purificación del aire, la infiltración del agua, la provisión de madera, plantas medicinales, insectos que polinizan cultivos, entre otros.

Pero pese al desolador escenario, no todo está perdido: el bosque esclerófilo requiere medidas urgentes de conservación y manejo para su recuperación, y desde distintos espacios, hoy somos muchos los que trabajamos para restaurar este reservorio de biodiversidad.

Es el caso del proyecto “Restauración Ecológica y Parque Interpretativo en Predio UC San Carlos de Apoquindo”, una iniciativa coordinada por el Centro de Ecología Aplicada y Sustentabilidad CAPES UC, para la creación de un parque que integre actividades de manejo y restauración del bosque esclerófilo con actividades educativas e interpretativas, en una nueva zona de acceso a la pre-cordillera.

El proyecto consta de cuatros ejes: 1) restauración del bosque, analizando el estado actual de la biodiversidad y su funcionamiento ecológico, y ejecutando estrategias mixtas de recuperación: siembra y plantación; 2) diseño y construcción de una solución de ingeniería para la infiltración, acopio y distribución de aguas lluvia; 3) creación de un espacio educativo de acceso universal que concientice sobre el valor ecológico del bosque esclerófilo y la Cordillera de Los Andes; y 4) recorrido educativo e interpretativo cuyo contenido, instalaciones y diseño evoque sensibilidades y despierte cuestionamientos en los visitantes. Los anteproyectos del parque ya fueron financiados y ejecutados, y actualmente, CAPES se encuentra en una fuerte campaña para sumar socios estratégicos y levantar recursos para su implementación.

Asimismo, el Centro contribuye con conocimiento básico y aplicado en el desarrollo de otros esfuerzos de conservación de este bosque, como la participación del investigador Patricio Pliscoff (PhD) en la iniciativa del Centro de Estudios Públicos “Conservación, Institucionalidad y Filantropía”, que tiene por objeto contribuir a preservar la biodiversidad terrestre identificando los ecosistemas aún desatendidos en las áreas protegidas públicas y privadas dentro de un contexto de cambio climático, y a través de propuestas de políticas públicas elaboradas por un grupo de personas de destacada trayectoria ambiental.

Con estas colaboraciones, estamos abordando la crisis de biodiversidad a través de un modelo de apertura y gestión integral, creando un piloto de restauración ecológica del bosque esclerófilo, avanzando hacia el compromiso de carbono neutralidad y aportando con conocimiento científico en la búsqueda de soluciones que nos permitan avanzar hacia la sustentabilidad.


Francisca Boher es doctora en Ecología de la Pontificia Universidad Católica de Chile y coordinadora de Vinculación y Transferencia del Centro de Ecología Aplicada y Sustentabilidad, CAPES UC.

Patricio Pliscoff es doctor en Ecología de la Universidad de Lausanne, Suiza, académico de la Pontificia Universidad Católica de Chile e investigador del Centro de Ecología Aplicada y Sustentabilidad, CAPES UC.

Créditos imagen: Andrés Bertens